Buenas viñas y vinos, pero algunas (Emiliana-Morandé por ej) llevaron muy poco vino y se agotó rápido. Bocadillos suficientes, poco espacio.
Hermoso el lugar,buenos vinos.. Aunque faltaban algunos y en comida un ceviche de salmón.
El espacio fue muy pequeño para la cantidad de personas que asistieron, podrían habilitar otras dependencias del hotel
FALTÓ DISPONIBILIDAD DE AGUA PARA BEBER Y ALGO DULCE PARA CORTAR SABORES